En el caso de la pintura, la introducción del Renacimiento fue muy lenta por la persistencia de la pintura flamenco-gótica. No obstante, la compra de obras a Italia, la estancia en el país de autores españoles para su formación y la llegada de autores extranjeros fue provocando el cambio.
La técnica que se usa es el óleo sobre tabla, apenas se desarrolla el fresco y solo al final del siglo se utilizará el lienzo. La temática es religiosa y podemos dividir el siglo en tres períodos:
En este período se dio una paulatina introducción de las formas italianas, pero sobre una sólida base de pintura flamenca.Podemos distinguir muchos autores entre los que destacan por ejemplo Pedro Berruguete que comenzó siendo muy gótico y tras su estancia en Italia adopta algunas formas, temas, luces, colores, etc.
También nos encontramos con Alejo Fernández que destacó en Andalucía por su obra de influencia flamenca pero con rasgos de presencia italiana en los amplios escenarios y en las perspectivas lineales.
Su principal obra fue la Virgen de los Navegantes, que acoge bajo su manto a Colón, Pizarro y Hernán Cortés. Esta obra se encuentra en el Archivo General de Indias en Sevilla.
Igualmente, nos encontramos aquí con Juan de Flandes que trabajó para la corte de Isabel la Católica e introdujo en sus pinturas las fórmulas constructivas y decorativas del Quattrocento.
En el segundo tercio desapareció completamente la influencia de la pintura flamenca y se asentaron totalmente las bases de Rafael sobre todo en el foco valenciano donde destacan autores como:
Juan de Juanes que tras un viaje a Italia empezó a realizar una pintura dulce y sentimental; o como Pedro Machuca que era además arquitecto y se caracterizaba por una mezcla de rasgos de varios autores italianos como se manifiesta en su obra “Descendimiento”, de carácter manerista por el colorido y la tensión de los personajes. También podemos encontrarnos a Luis de Morales con su obra "Virgen de la leche"
La obra esencial de este período es la decoración pictórica del Monasterio de El Escorial. En esta obra trabajaron autores como Navarrete, Zúccaro y Tibaldi. Este último pintó la bóveda de la Biblioteca del Monasterio.
También en este tiempo se instauró en la corte la modalidad del retrato por parte de Sánchez Coello y Pantoja de la Cruz. Y por supuesto, aquí encontramos al autor fundamental del Renacimiento Español: El Greco